- Cliente
- Audi
- Ubicación
- España
- Categoría
- Retail
- Estado
- Ongoing
- Renders
- Playtime, Horoma
Nuestra idea de movilidad está cambiando. El sueño de ser propietario de un vehículo se ha convertido en algo más parecido a un deseo de movilidad compartida. Esto está cambiando el enfoque de la industria automovilística: De producto a usuario, de conductor a pasajero, de viaje a trayecto, de experiencia a exploración. Citando a Audi, moverse significa cumplir con el cambio. Cuestiona lo familiar y abraza lo desconocido hasta que supera el poder de nuestra imaginación. Si la movilidad es un encuentro constante con lo nuevo, ¿cómo puede actuar su espacio físico de la misma manera?




UN MODELO ESPACIAL ELÁSTICO
La investigación para Audi replantea los elementos de diseño comunes para situar al usuario, la industria y la sociedad al frente, en lugar de centrarse en los productos en exhibición. Este concepto espacial funciona como un sistema autónomo basado en dos tipos de particiones verticales que crean elasticidad y estimulan el movimiento del día a día: caminar, sentarse, conducir, pasear.
- Una primera capa de paredes dibuja un espacio central que funciona como un ágora donde se llevan a cabo eventos y actividades. La introducción de aberturas en las paredes enmarca la vista que los visitantes tienen de la zona central, como si de pequeños destellos se tratase, elevando así su curiosidad.
- Una segunda capa de paneles ondulados y translúcidos se curva alrededor del espacio central, creando y conectando áreas más pequeñas que varían en luz, tamaño y función. Diferentes rangos de transparencia, formas geométricas y giros inesperados crean una sensación de fluidez y exploración, con el objetivo de conectar personas, programas y formas.
Al utilizar estos dos elementos simples, el modelo espacial de Audi crea una amplia colección de espacios que se adaptan a cada momento, necesidad y personalidad. El sistema puede aplicarse a cualquier espacio existente e incluso convertirse en la base para una nuevas construcciones.


EL ESPACIO FÍSICO COMO DECLARACIÓN DE INTENCIONES
En lugar de la tradicional vitrina, el espacio físico se ha convertido en el entorno ideal para que las marcas analógicas exploren. Éste ha evolucionado hasta ser en una herramienta para la creación de cultura, permitiendo a las marcas expandir su universo a través de un enfoque interdisciplinario e inclusivo que interpela a una amplia variedad de visitantes y colaboradores: Tanto un curioso transeúnte, un cliente informado o un conocedor de la marca.
Igual que la movilidad, el espacio es capaz de ser una fuerza transformadora. Nos permite hacer preguntas, cuestionar el modo en el que vivimos y abrazamos lo desconocido. Puede incluso convertirse en una afirmación en sí misma, cuestionando su propio propósito y relevancia.


